domingo, 20 de febrero de 2011

Siguiendo en la linea.

Las emociones positivas según Spinoza se llaman así, según produzca Placer o Dolor. Concreta que una emoción positiva es tal si cumple alguna de las siguientes condiciones:

  • El sentimiento que provoca se percibe como agradable.
  • El objeto de la emoción se valora como bueno.
  • La conducta que uno realiza mientras la experimenta la evalúa favorablemente.
  • Las consecuencias de la emoción son beneficiosas.
El optimismo es la tendencia a esperar que el futuro depare resultados favorables y se considera como una dimensión de la personalidad, como rasgo estable. El optimismo puede llegar a predecir la buena salud y la longevidad.

Está introducción sobre las emociones positivas es para que podamos conocerlas, pues no siempre somos conscientes de estas emociones y hay que aprender a reconocerlas para así saborearlas y sacarles el beneficio que nos pueden aportar.

Hay optimismos patológicos que causan infortunios y desdichas imprevistas. El optimismo puede ser disfuncional, es decir, un optimismo idealista, que no es más que una irrealidad.
La idea de progreso es una combinación de Pesimismo y Optimismo; pesimismo con respecto al presente, optimismo en lo referido al porvenir. El optimismo inteligente deber ser realista.

El optimismo, por su gran poder, puede ser manipulado. Hay prácticas del sistemas políticos entre otros, que institucionalizan el optimismo manipulándolo en su provecho.
Por eso hay que aprender a reconocer bien nuestras emociones ya sean positivas o negativas. Pero aquí intentaremos conocer las positivas, pues es de ellas de las que me quiero nutrir como persona y motivarme para seguir. 
El optimismo es resultado de tendencias positivas de nuestra mente, ciertas desfiguraciones benignas en el modo de apreciar, de sentir y de recordar las cosas que vivimos . Estos mecanismos están presentes  y se pueden observa fácilmente en los bebés.

Debemos aprender del optimismo, pues ellos nos empujará a la esperanza y a albergar ilusiones.
Para que este optimismo sea realista debemos:
  • Ponernos metas alcanzables y con sentido.
  • Abrirse al exterior y olvidarse de uno mismo.
  • El reconocimiento y satisfacción de las necesidades biológicas como algo imprescindible.
  • Aceptar la propia realidad: quererse como uno es.
  • Atreverse a ser Valiente.
  • Educar y perfeccionar la capacidad de goce.
  • Desarrollar y no dejar que se apague el gusto por el juego y la travesura.
  • Fomentar las relaciones intimas.
Podemos Aprender, podemos desarrollarlo y  podemos tener esos sentimientos positivos, así  estas emociones positivas y de optimismo  llegarán  a nuestra vida. 

 

1 comentario:

  1. Reyes, ¿sabes si existe algún estudio válido y fiable que relacione el optimismo y la buena salud?

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